Más
de un nerd debe haber pensado de pequeño cómo hacer para que
toda esa energía que gastaba nuestro querido hamster dándole
vueltas a su ruedita podría haber sido aprovechada. Al parecer,
este granjero de Irlanda del Norte de nombre William Taylor,
encontró la solución, pero con animalitos un poco más grandes.
Luego de meses de análisis y
sabiendo que las vacas de
esa región caminan cerca de ocho horas al día, no tuvo mejor
idea que ponerlas en una cinta fresadora, donde deben caminar a
través de una pequeña pendiente para llegar al recipiente de la
comida. Algo así como el palo atado en la cabeza con la
zanahoria colgada de la punta.
El Livestock Power Mill, que no
es el primer invento de este irlandés, consiste en que el animal
genere energía cinética
al mover la cinta, la cual es acumulada en una batería (en el
link a la nota se puede ver una imagen). Taylor estimó que con
una vaca promedio (600kg aprox) se pueden generar dos
kilovatios, suficiente energía para alimentar cuatro máquinas
ordeñadoras. Un sistema de 50 vacas caminadoras podrían
significar un ahorro de US$ 100 mil en tres años en una granja
de tamaño mediano.
Antes de este invento, Taylor
creo una mezcladora de estiércol y una pluma que evita que los
animales pateen cuando son vacunados.
Queda claro que el sistema es más
que óptimo para regiones donde el ganado bovino sólo cumple
funciones de proveedor de leche, ya que en algunos países de
Sudamérica donde son utilizadas para consumo humano, una vaca
que trote ocho horas al día puede terminar con más músculos que
Stallone e inservible para consumir.
Pero si pensamos en el invento de
Taylor como una alternativa energética, ¿cuántos gatos o perros
domésticos podrían hacer falta para alimentar nuestros hogares?
La incógnita queda planteada.
Link: Odd
Invention: Idle Livestock Hit The Treadmill to Generate
Electricity for Farms (Popsci)