19/01/2011
Que nos hagamos amigos, o establezcamos una relación de pareja
con personas con las que compartimos afinidades y gustos, no es
nada nuevo. Pero que en esa elección existan aspectos genéticos
vinculados, sí que es novedad.
Resulta que un estudio realizado por científicos de la
Universidad de California en San Diego (Estados Unidos), ha
demostrado que no sólo tenemos similitudes genéticas con
nuestros familiares, sino que también elegimos a nuestras
amistades en función de las características contenidas en su
ADN.
Para llegar a esta conclusión, los científicos encargados del
estudio analizaron las semejanzas genéticas y la interconexión
de las relaciones humanas, utilizando dos estudios
independientes de salud estadounidenses. Estas bases de datos
contenían información detallada de varias secuencias del genoma
de los individuos y también de sus redes sociales.
Así, escogieron marcadores genéticos específicos dentro de la
relaciones sociales de un individuo y descubrieron que los seres
humanos tienden a forjar amistades con personas con las que
comparten dos de los seis marcadores evaluados.
Buscamos complementarnos
Este aspecto sí que explica porqué
muchas veces escogemos de parejas a alguien que es nuestro “polo
opuesto”… Te ha pasado, ¿no?
Pues resulta que según este estudio, si bien es cierto que
seleccionamos a nuestros amigos (y pareja) por similitudes en el
código genético, también nos sentimos atraídos por gente que
posee genes (que marcan características) de los que carecemos
completamente.
Así, las personas que portaban un gen que se ha asociado con una
personalidad abierta tendían a hacer amigos entre otros que
carecían del mismo, lo que parece indicar que buscamos
complementarnos.
Pero, por otro lado, los investigadores descubrieron que los
individuos que portaban el marcador DRD2, que ha sido asociado
con el alcoholismo y otros rasgos, tendían a ser amigos de otros
positivos en DRD2… ¿Será por eso que sentimos que la cerveza nos
une?
Esta investigación también podría ayudarnos a entender aquello
que llaman “primera impresión” o “amor a primera vista”… Nada de
almas gemelas, como siempre hemos sospechado: ¡Pura química!
Link: La clave secreta de cómo elegimos a nuestros amigos (ABC)
Fuente: www.fayerwayer.com