Al
consumir recursos de forma irracional, se reduce la superficie de bosques,
praderas, desiertos, manglares, arrecifes, selvas, y la calidad de los mares del
mundo. Al impacto de una persona, ciudad o país, sobre la Tierra, para
satisfacer lo que consume y para absorber sus residuos, se conoce como huella
ecológica.
La huella ecológica de una persona representa el área de tierra productiva y
ecosistemas acuáticos necesarios para producir los recursos empleados por dicha
persona y para eliminar sus residuos, tomando en consideración un determinado
nivel de vida, e independientemente del lugar geográfico en que dichas tierras
se encuentren.